jueves, 14 de noviembre de 2013

Psicoanálisis ¿una herramienta para la prevención?

Escrito por Silvia Sisto


Manuel tiene 18 años y lo manda el juez,  lo encontraron con un arma. Según él,  la tenía para defenderse de unos pibes que lo molestaban. La policía le pega tanto,  que tiene la cara torcida por un culatazo. También le dieron un escopetazo en la pierna.
Sus padres se separaron cuando él tenía dos años. Ahora, vive con su mamá, sus dos hermanos y su padrastro, aunque en realidad esto no es tan así. También vive en lo de su novia  y a veces con su abuela y tía abuela, cerca de la casa de la novia. El padre de Manuel está preso hace más de un año.
Se presenta como enojado, errante. Dice que se olvida de todo, que tiene la cabeza llena de pensamientos que no lo dejan ni dormir. Que es el “renegado” de la familia. Él quiere progresar y los demás, no. En  medio de este relato  y haciendo como que repaso mis notas le digo: - ¡Ah!...pero vos casi caes preso como tu papá!! –“Si la verdad… no lo había pensado”, dice Manuel.
Por otro lado, él es acusado por llevar un arma  y a la vez acusa a la policía por maltrato y golpes. Le señalo esta doble situación que tampoco había notado. Acusa y es acusado. Este  no es un detalle menor teniendo en cuenta que vive bastante cerca de la comisaria y se cruza muy seguido con los policías que lo golpearon. A pesar de todo lo que sufrió y de lo amenazante de la situación,  no tiene miedo.
Comenzamos a trabajar en este contexto. Le doy un horario y a la siguiente sesión él llega y yo ya estaba atendiendo. Se trata de un Centro de Día, donde al llegar hay un espacio de “sala de espera” allí alguien recibe y contiene hasta que son atendidos. Manuel, tiene que esperar y se exaspera, cuando salgo no me mira tengo que acercarme y tocarlo:- Hola…¿pasas? Con muy mal gesto pasa al consultorio y me dice:- “¿Qué?!! ¿Estoy pintado yo acá?!!”. Y ahí comienza un dialogo tenso y ajustado,  donde trato de mostrarle que no lo atendí antes, porque él no estaba. Yo, estaba en el consultorio.
Salimos de esa tensión con un chiste mío. Más que chiste, un sentido posible al malestar. Le digo:   - ¿Sabés lo que pasa…? Que vos sos un cabrón, ¡engranás de nada-se ríe, y  creo que ahí se instala alguna transferencia posible.
Habla de cómo lo torturan sus pensamientos, de que no puede dormir, pero no puede contar nada respecto a los pensamientos… no insisto.
Cierto día como si nada, me cuenta que va a ser papá.  Su novia de 16 años está embarazada por segunda vez, el primero lo perdió, en esa ocasión él no sabía que ella estaba embarazada. Se habían peleado y él se entera cuando la muchachita pierde un embarazo de 5 meses en el inodoro. Ella usa ese episodio para torturarlo y retenerlo.
Aquí empiezan a poder ubicarse, en parte, los pensamientos que lo torturan. La escena con la policía acontece en ese momento, cuando él se entera del hijo y su pérdida, con lo cual es posible que se haya alterado y se haya hecho pegar. Lo cual no justifica los golpes que le dieron.
Ordenar este tramo de la historia fue de bastante alivio para Manuel y también intentar deslindar responsabilidades: si él no sabía del embarazo, cómo podía ayudar y aunque hubiera sabido, hay situaciones que no se pueden evitar.
Mientras tanto su novia lo manipula y lo maltrata, cierto día  llega a la casa de ella- donde dormía hasta las 3 de la mañana para luego ir de su abuela donde duerme en el piso- y ella lo “ningunea” porque estaba con la prima, lo deja afuera (tal vez como en la sesión que llega y yo no lo atiendo enseguida, por eso su malestar). Él siempre queda afuera, no tiene casa, circula errante.
La sesión siguiente a ese episodio, vino muy dolido, “que ella no lo dejaba estar con su hijo, que él quiere cuidarlo…” entonces, conversamos sobre cómo hablar con ella, cómo tratar de que no lo maltrate y si lo hace, él tal vez pueda irse a otro lugar… ¿hay otro lugar? Allí aparece la posibilidad de arreglar un galpón o de irse a Villa Dominico- la casa de la madre y el padrastro- . Cuando vislumbra esas posibilidades la enfrenta. Le dice que él se va, que cuando nazca el bebé se ocupará de su hijo y que ella se quede con la prima. A partir de este momento, empieza a poder dormir.
-“Sabe Silvia... estoy bien, pude dormir tranquilo. Ella quería pelear pero yo, tranquilo”.
Algunas repercusiones en su subjetividad:
-      Trae un cuaderno para hacerme preguntas sobre el parto, sobre cómo cuidar al bebé. Cómo ser padre.
-    Decide escribir cartas a sus amigos presos, aclarando que si vuelven a delinquir ya no serán amigos de él. Le señalo que con ese gesto se está cuidando él y también a ellos.
Nace el bebé y con este acontecimiento, un sueño: Él está en la calle yendo a lo de la novia, hay un tiroteo. Él pasa igual y una bala le pega en el hombro. No le duele. De pronto aparece en la casa de su novia.
Entonces le digo: - ¿hay algún tiroteo en ese camino?
-      “Y, sí… está lleno. Hay una piba que me pasó el celular, buena onda, me dan ganas de invitarla al cine”.
Siguiente sesión: “Le conté a mi novia el sueño y se puso celosa…”- ¿por qué le contaste? - “No sé… para hacer “disturbio”
Le pregunto por esa palabra, no es de uso común, y me dice: “… se entiende ...disturbio”. Sí,  le digo, pero me sonó a cuando la policía dice: “¡¡Dejen de hacer disturbios!!”. Se ríe y agrega:- “Parece que quiero ir en cana.”           
Este sueño y la interpretación por boca del propio paciente hablan del valor preventivo del psicoanálisis. Este chico sumamente vulnerable, sin recursos económicos ni entramado familiar que lo sostenga pudo hacer uso de esa herramienta cuando el Centro de Día se vuelve para él una casa. Comienza a asistir a los talleres de panadería y de jóvenes coordinados por otra analista y un Pastor Protestante. Concurre puntualmente a las entrevistas conmigo. Valora y respeta nuestro trabajo, lo agradece todo el tiempo…  - “Gracias, Silvia”.
El trabajo se llevó a cabo en un Centro de día del conurbano bonaerense, donde se trabaja desde diferentes espacios tratando de restablecer o establecer lo que Winnicott llamó, un ambiente facilitador.  Un alojamiento subjetivo. Manuel participó de talleres y grupos, además de su tratamiento individual.


 *La foto fue tomada en el barrio donde vive este chico y dice: “No somos peligrosos, estamos en peligro. Los chicos”. 

Psyche Navegante N° 98 - www.psychenavegante.net   - Agosto 2011
Psicoanálisis -  Práctica


Problemas Cruciales de Salud Mental en la Actualidad. Habitar el Estado

Escrito por Silvia Sisto

Si algo me enseñó esta experiencia que voy a relatarles, y que venimos recorriendo desde hace 3 años, es que no hay lugar dado para habitar, aunque edilicia y administrativamente haya. Hay que construirlo.
Es una experiencia donde acordamos entre todos dejarnos atravesar por el otro discurso para entender de qué se trata. Acordamos también algunos principios fundamentales: la existencia del inconsciente y sus implicancias y los límites de nuestras intervenciones. No somos superhéroes. Como dijo Roberto Gutman: “para habitar el estado hay que destacar su incompletud”. Y agregaría “y la nuestra”.
¿El estado da un lugar o un espacio? El lugar se construye en espacio y tiempo. Inclusive en la calle se puede armar un lugar para habitar, aunque nos duela.
El año pasado hablé de trabajo en territorio, ir a la casa del otro a percibir, a estar, a hacerse/hacerles un lugar. El planteo sigue siendo similar, reunirme con los equipos de educación sigue siendo eso: ir al territorio del otro en el sentido discursivo, escuchar en sus modos, en sus formas, en sus posibilidades, en su estructura para bien y para mal, que se topa con la estructura de salud mental. Quiero aclarar que sin ellas no se puede encarar este trabajo. Escuchar en los actos creativos y desesperados, en las  impotencias compartidas.
Para los equipos es ir a la casa, a la escuela, al hogar de niños. A soportar en el sentido de soporte también, en los modos de esa escuela o casa, en ese otro lugar.
Decía el año pasado que no somos conquistadores del territorio del otro, en todo caso se trata de construir “entre” al modo del inconsciente.
El tiempo no es tema menor en esta construcción, está el tiempo lógico que en momentos de urgencia se hace insoportable. Mafalda decía: “lo urgente no me deja tiempo para lo importante”. Apurar una separación, una exclusión, una internación, puede precipitar males peores que los que se quieren evitar.
Cuando acepté la idea de supervisar clínicamente a los equipos de educación lo hice desde ahí, desde esa posición ética. Y desde Freud obviamente. Él ubicó: educar, psicoanalizar y gobernar como tres funciones imposibles…
¿Imposible en qué sentido? Van en contra del empuje pulsional, o sea de los otros tres: asesinato, canibalismo e incesto.
Generan ese malestar sin el cual no seríamos humanos, la cultura.
Introducen el síntoma. Cruce entre la ley y vida (S y R) para que la construcción de la realidad (S y I) sea menos insoportable.
Para mí habitar el estado, implica necesariamente, como tiempo lógico,  trabajar para tratar de transformar  a los tres antisociales que abundan en nuestra cultura actual. Y como también se dijo ayer, no es patrimonio de los más pobres. Y las políticas neoliberales sólo los engordan.
Las instituciones y reglamentos presuponen a veces un tipo de problema. La propuesta nuestra es inversa, pero a mi entender no es por complicados, sino que la velocidad de la cultura actual hace que todo cambie muy rápido. El Paco no espera estadísticas ni especialistas.
Los equipos de los que hablo si algo transmiten es desazón, cansancio, impotencia, una lucha desmedida entre: los conflictos que tienen que atender, las herramientas con que cuentan y su propia subjetividad. Si algo creo que aportó este espacio de entrecruzamiento es que desde el Psicoanálisis ampliáramos las herramientas, no sin malestar. De otra manera no podría ser. Encontrarnos con estos tres en relación a la clínica, todo el tiempo, es difícil de tramitar. Muchas veces lo traumático queda del lado del equipo.
En este sentido, hay otra clínica para atender y esa es la tarea de los supervisores: la clínica de la transferencia de trabajo. La que nos implica como equipos atravesados por estas circunstancias. 
Nos vemos con los tres antisociales, en los equipos, en las modalidades de los equipos y no es sólo por especulares respecto de quienes nos consultan, es por humanos. Ningún animal es capaz de esos tres, tampoco del lenguaje.
Como somos intelectuales, estructurados como un lenguaje, nos devoramos con palabras, quejas, denuncias, recursos en apariencia simbólicos. Digo apariencia porque no toda escritura es simbólica como no todo golpe es Real.
Pareciera que complejiza la tarea cierta abundancia de actores, ¿qué raro no? Es que a veces lo mucho no es bueno. A esta abundancia de actores, a esta especie de disgregación organizada, nos sobrepusimos con una de las herramientas más nobles que nos dejó Lacan, los Discursos.
Trabajamos bastante alrededor de los amos, el fundante y el universitario. Donde los saberes comandan congelando al otro de la historia, tratamos de salir de ahí, de evaluar el caso por caso. Hablo en plural  justamente porque en este trabajo se trató de que el saber circule. Verónica Colombo y Virginia Rodriguez fueron mis copilotos, ellas logran, realmente son magas, que la burocracia sea útil. Que pueda usarse en beneficio del caso por caso.
Algunos miembros de los equipos llamados, ayer de Alta complejidad, se nombraron a sí mismos como de “alto impacto”.
Esta nominación es efecto de la transferencia de trabajo, transferencias que hay que pensar atendiendo a lo que se habló ayer también sobre la disgregación social a la que la cultura actual empuja. Esto es psicoanálisis en extensión.
Un recorte muy breve:
Consideremos una familia con varios hermanos quienes, en un momento, dejan de concurrir a la escuela. La asignación universal por hijo implicó documentar a los niños, llevarlos al médico y hacer que asistan a la escuela. Si bien la fuerza del impacto que provocó estas medidas se centró en el déficit educativo, tuvo como efecto colateral beneficioso el aumento de la visibilidad de los niños para nuestros equipos de trabajo. Si por alguna razón no van a clases por tiempo prolongado ninguno de los hermanos, y no hay como comunicarse con la familia, se pide la intervención de los equipos que menciono: EDIA, EIPRI y COF (educación inicial, primaria o familia), según el caso.
En el caso que menciono el equipo llega a una casa sumamente humilde donde 7 niños y su mamá se encontraban en estado de abandono total. Una de las criaturas se hace ver, se levanta la ropa y muestra… parecía lepra dice la colega. Pero no, era sarna en estado muy avanzado. Esa señora ya no tenía fuerzas para salir a pedir ayuda. La intervención fue compleja, con los aciertos y errores que se imaginen, pero si ese equipo no asistía esos chicos y esa mamá, se morían. Habitar el estado es esto, no es ninguna entelequia, el tema es cómo.
Aquí tenemos un caso ideal para tratar de diferenciar “asistencialismo de estado” de “intervención clínica” con los recursos que el estado nos da. La intervención clínica permitió escuchar a ese nene.
Creo que esa búsqueda de diferencia es lo que llevó a estos equipos a pedir un espacio clínico. Tratar de leer más allá de la urgencia social pero no sin ella. Pensar con los articuladores teóricos que el psicoanálisis brinda, hizo posible situar en ese caso: el deseo mortífero como única salida, pero, a iniciativa del nene que se acerca y dice: mire, todos tenemos esto… se puede ubicar que al menos uno, quería vivir.
No es poco, por poco que parezca…
Dije antes que el espacio a habitar se construye… es lo que decía Winnicott… crear lo dado. Ahí, acá, en la constitución y en la ley de salud mental tenemos el lugar, ahora hay que crear con eso. Esta experiencia desde esta dirección de Salud Mental y en estas circunstancias abre en mí una gran “ilusión” en el sentido más psicoanalítico de la palabra respecto a cómo habitar el estado.


Revista Psyche Navegante N° 100 - www.psyche-navegante.com - Año 2012


miércoles, 6 de noviembre de 2013

Francia o el retorno de los ideales: Egalité, Fraternité et Lliberté.

Psyche Navegante Nº70- www.psyche-navegante.com.ar dic 2005
Autor: Silvia Sisto

Tema: Pensar y leer la historia desde el psicoanálisis puede ser una  herejía a la que tal vez tengamos que atrevernos. La historia se hizo con sujetos o sin ellos. De allí devendrá el resultado.

[1]Me pareció interesante poder pensar los actuales acontecimientos en Francia y toda Europa, donde jóvenes y niños mueren para matar y destruyen  lo propio, desde otra perspectiva. Intentar  hacer una lectura a la letra de lo que la historia cuenta de los inicios de esta historia. Tal vez sea un atrevimiento meterme con el  tema de esta manera. Sin embargo me siento  avalada por los recursos que el psicoanálisis habilita a través de los vestigios y marcas que lalengua va produciendo en el sujeto y va dejando como sedimento de generación en generación. Sujeto con el que hay que contar a la hora de hacer cualquier historia.
La Revolución Francesa
Primera cuestión a tener en cuenta: una revolución es una vuelta de 360º es decir una vuelta al punto de partida. ¿Año 2005 habremos avanzado mucho respecto de aquella noche en la Bastilla?
[2]Fue el cambio político más importante que se produjo en Europa, a fines del siglo XVIII. No fue sólo importante  para Francia, sino que sirvió de ejemplo para otros países, en donde se desataron conflictos sociales similares, en contra de un  régimen anacrónico y opresor, como era la monarquía. Esta revolución significó el triunfo de un pueblo (la burguesía) oprimido y cansado de las injusticias, sobre los privilegios de la nobleza feudal y del estado absolutista.
En 14 de Julio de 1789, la burguesía se vio apoyada por un gran sector explotado por la nobleza, los campesinos, que en medio de una agitada multitud revolucionaria formada por hombres y mujeres, saturados de injusticias y de hambre, se dirigen violentamente a la Bastilla, símbolo del régimen absolutista, donde funcionaba como cárcel de los opositores al sistema de gobierno, y  la toman por la fuerza. Esta demostración atemorizó a los partidarios del antiguo sistema, y sirvió para inclinar la balanza en favor de los revolucionarios, desplazando así del poder a los nobles y partidarios del absolutismo. Paralelamente se produjo en las zonas rurales levantamientos de los campesinos contra los señores feudales, lo cuales fueron asesinados, y sus castillos saqueados e incendiados. A este movimiento social por la justicia y fraternidad de los hombres en 1789, se lo conoce como el Gran Miedo.
Si algo despiertan los jóvenes sin causa o desencausados que incendian autos y queman escuelas y clubes propios, es el gran miedo.
 Parece que ese nombre hizo marca.
Los diputados de la asamblea, decidieron eliminar los privilegios de la nobleza, se les obligó a pagar impuestos y se eliminó el diezmo a la Iglesia. Pocos días después la asamblea dicta la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano, esta proclama se transformó en la síntesis de las ideas revolucionarias, basadas en tres banderas: igualdad, fraternidad y libertad.
El cambio de mayor importancia es que ahora los representantes podían ser elegidos mediante el sufragio universal, permitiendo una mayor participación de sectores humildes y populares, llamados sans culottes (sin calzones).Desde 1792 los jacobinos lograron el control de la Convención, y sus principales activistas fueron: Dantón, Robespierre, Marat y Saint Just.
En estos días la República Francesa tiene que combatir a lo pobres oprimidos que inmigraron  buscando un lugar en la tierra de la liberté, fraternité et egalité. Todos hermanos, iguales y libres. Ideales que ante lo imposible de ser sostenidos en forma absoluta, los franceses tendieron a resolverlo, otorgándose los tres derechos  sólo para unos, los demás quedan afuera.
Quedaron en una paradoja: " libre mientras te sometas a nuestras normas. Igual mientras te asimiles  a nuestra cultura pero, aún así, seguirás siendo diferente aunque desconoceremos esas diferencias, y hermanos... entre Uds. porque nosotros somos de otra familia.
Esos mismo ideales consagrados en la  revolución y sostenidos en forma ambigua - por no reconocer su  imposibilidad y desde allí  "hacer lo posible", deja a algunos de un lado  y a otros del otro, del espejo.
Será por ésta cuestión que Chirac [3]invitó a los empresarios, los directores de los medios audiovisuales y a los jefes de los partidos políticos a reflejar la diversidad de la población francesa. También apeló a cada ciudadano a implicarse «verdadera y personalmente» en la lucha contra el «veneno» de la discriminación.. «El deber de la República es ofrecer a todos las mismas oportunidades».
Darles un lugar en el espejo mediático a los que quedaron afuera de la trama cultural, a los que vieron arrasada su cultura por las leyes que por ejemplo prohibían el uso de símbolos religiosos en las escuelas. Apelando al ideal de todos iguales borraron las marcas culturales de los inmigrantes.
Volvamos al 1700…
Para tomar mejor partido de su control, los jacobinos hicieron alianzas con los sans-culottes, y durante 1793, se creó una institución destinada a establecer un rígido control de los opositores, y castigarlos duramente y aplicar la pena de muerte a todos aquellos que no apoyaban el sistema de gobierno republicano. Este instrumento fue dirigido en persona por Robespierre.
Se trataba de mantener dominados a sus opositores, a través del miedo, por lo que se lo llamó: El terror revolucionario
Los jóvenes que hoy invaden las calles - no sólo en Europa cualquiera que camine por el conurbano bonaerense o algunas zonas de capital de madrugada puede dar fe, que los jovencitos han logrado aterrorizar a los adultos- ¿son una continuidad de aquellos sans-culottes? que sabedores de ese miedo que generan en el otro, lo usan.
Las  medidas tomadas por la Convención no pudieron atender a todas las exigencias del sector popular, que seguían sufriendo la crisis económica. Se trató de llevar un control de precios para los alimentos básicos, aplicando severa penas a quienes no las acataban, pero no se logró el efecto deseado, lo que llevó al sector de los sans-culottes a romper su alianza con los jacobinos, creando una fisura y debilidad al partido gobernante.
La misma izquierda francesa y muchos de por aquí han tratado de distanciarse y diferenciarse de éstos movimientos… eso no es la revolución!!! ¿No?
Revolución: vuelta al mismo lugar.
Julio de 1794
Conociendo la debilidad de este gobierno, la alta burguesía aprovechando la situación, y deseosos de terminar con los “excesos del populacho”, produjeron un golpe de estado, desplazando la república y creando un Directorio, que para lograr su autoridad se apoyaron en los militares. Los líderes de la Convención fueron guillotinados.
Entre los militares que apoyaban al Directorio, se encontraba Napoleón Bonaparte, que no tardó en hacerse del poder, mediante un golpe militar. En 1799 se apoderó del gobierno de Francia, y se coronó como Primer Cónsul, concentrando cada vez más poder, hasta llegar a emperador en 1804. Con el tiempo la burguesía lo apoyó, ya que conservó muchos de los principios declarados en la Constitución, especialmente aquellos que beneficiaban a la burguesía más acomodada. A su vez  ésta lo apoyaba, porque evitaba  el regreso de la república jacobina y del antiguo régimen aristocrático.
Una de las consecuencias directas de la Revolución Francesa fue la declaración de los Derechos del hombre y los Ciudadanos, y la difusión  de las ideas democráticas.
Y llegamos al 2005, sé que estoy pegando un salto enorme!!! ¿360 grados? Tal vez estamos en el mismo lugar pero más deteriorados. Ya no hay monarquía a quien oponerse, ni existen los tres mosqueteros. Eso sí, sans-culottes parece que sobran, cada vez hay más. Los aristócratas de entonces seguramente son muchos menos y el poder está mucho más concentrado. Hay un centro apretado y fuerte comandado por el significante de la época: El dinero. Se trata de generar más ganancias. Ya no hay nombre ni linaje, ni empresa que  trasmita nombre y saber. Además el patrón, jefe  o encargado está cada vez más ausente, ¿ trató alguna vez de hacer un reclamo a alguna  de las empresas que manejan teléfonos y cables?, ni que hablar de Internet. Marque1, marque 2, marque o, si desea volver… numeral. Al quinto intento uno se siente… muy solo. Además esa máquina le ha quitado el trabajo a las telefonistas, auténticas diosas de la comunicación. Recuerdo cuando trabajé en una central de turnos telefónicos hace… ¿20 años? Sí, más o menos. Allí cinco operadoras muy jóvenes atendíamos a la gente. Nos felicitaban, nos mandaban de paseo, nos hacían regalos… hasta que llegó el conmutador central y la telefonía digital.
En estos últimos 20 años llegaron muchos aportes de la ciencia y de la tecnología para estar al servicio del hombre y sin embargo nosotros estamos horas al servicio de ellos. ¿Trató de hacer una consulta a una empresa de celulares?
Francia es el reflejo de una época, la época de la democracia, y no quiero decir que sean mejores las dictaduras, pero hay algo en la ambigüedad de los mensajes que estas democracias trasmiten que se torna enloquecedor.
 Francia en llamas.
[4]Mientras tanto, en declaraciones que formuló al periódico Financial Times, el Ministro de Empleo, Gérard Larcher, responsabilizó en parte a la poligamia por los disturbios. Según el funcionario, las familias polígamas pueden llevar a "un comportamiento antisocial" entre
los jóvenes que carecen de modelo paterno, lo que disuade a los patronos a la hora de reclutar a individuos pertenecientes a esos grupos étnicos. Los políticos creen que hay entre 10.000 y 20.000 familias polígamas en Francia, en su mayoría procedentes de países africanos como Argelia, Mali y Senegal, donde la poligamia es legal.
Según el Ministro de Empleo no les dan trabajo porque no tienen un modelo paterno fuerte. Tienen otro modelo, que seguramente no encaja en el modelo occidental europeo y eso crea dificultades. Responsabiliza a la poligamia y no a su falta de inclusión como parte de la cultura en éste momento. Puedo situar la ambigüedad de este mensaje también,  en el hecho de que como primer ministro de empleo dice que un modelo paterno débil es nocivo y lo sitúa en el punto de la diferencia cultural y no en el hecho de que los “patronos” (padre-patrón) franceses no toman jóvenes por ejemplo musulmanes por pre-juzgar sobre el rol del padre allí. Con lo cual los suponen sin padres y los dejan sin trabajo. Sabemos que el trabajo es un elemento fundante de lazo social y de generación de intercambio de bienes y saberes.
Los psicoanalistas sabemos de los efectos que producen sobre los sujetos los mensajes ambiguos, si éstos son difundidos en masa y trasmitidos al instante por los diferentes medios que la técnica aportó. En horas, las noticias, las decisiones y los rumbos de los pueblos cambian.
Junto a la velocidad, la ambigüedad. Los tiempos subjetivos se ven superados en niños y adultos, nuestros consultorio dan prueba del cansancio, el stress y malestares que la gente padece. El “si pero no” es enloquecedor y si bien el retorno de los marginados sobre el centro viene pasando desde la Edad Media, en estos días la tecnología aporta la diferencia.


Silvia Sisto-Psicoanalista
sistosil@speedy.com.ar



[1] Algunas de las ideas aquí planteadas son fruto del intercambio realizado en la última reunión de Psyche-navegante sobre el tema
[2] Las referencias históricas fueron  tomadas del portal Planeta Sedna
[3] www.televerdades.com Clarín 18/11/2005
[4] www.televerdades.com  Clarín (.com.ar) 16/11/2005